Escrito por la Dra. Myra Flores.
Desde hace casi 10 años, el 14 de marzo (3/14 según el formato usado en EE.UU.) se recuerda como el “Día de π”, derivado de la aproximación de tres dígitos de π: 3.14. Hoy esta fecha toma un nuevo significado, el día de fallecimiento de uno de los genios más grandes de nuestro tiempo, el físico de fama mundial Stephen Hawking, quien murió a la edad de 76 años, pacíficamente en su casa en Cambridge en las primeras horas del día, según comentó su familia.
El científico británico era famoso por su trabajo con los agujeros negros y la relatividad, y además por los libros de divulgación científica que escribió, entre ellos, Una breve historia del tiempo, su bestseller que rompió varios récords de venta a nivel mundial.
Como estudiante de posgrado en 1963, se enteró de que tenía esclerosis lateral amiotrófica (ELA), una enfermedad de desgaste neuromuscular también conocida como enfermedad de Lou Gehrig. Le dieron solo unos pocos años para vivir. Pero vivió 54 años más. A la edad de 22 años, le diagnosticaron una rara forma de enfermedad de la neurona motora. Mientras se preparaba para casarse con su primera esposa, Jane (en la foto), los médicos predijeron que no tenía mucho tiempo para vivir. Estuvieron casados por 26 años y luego tuvieron tres hijos juntos.
Se convirtió en el líder de su generación en la exploración de la gravedad y las propiedades de los agujeros negros, los pozos gravitacionales sin fondo tan profundos y densos que ni siquiera la luz puede escapar de ellos. Ese trabajo condujo a un punto de inflexión en la física moderna, que se desarrolló en los últimos meses de 1973 en las paredes de su cerebro cuando el Dr. Hawking se propuso aplicar la teoría cuántica, las extrañas leyes que rigen la realidad subatómica, a los agujeros negros. En un largo y desalentador cálculo, el Dr. Hawking descubrió para su desconcierto que los agujeros negros, no eran realmente negros en absoluto. De hecho, descubrió que eventualmente se evaporarían, filtrando radiación y partículas, y finalmente explotarían y desaparecerían a lo largo de los eones. En 2007, Hawking se convirtió en el primer cuadrapléjico en experimentar ingravidez a bordo de un avión especialmente diseñado para simular la gravedad cero. “Creo que la raza humana no tiene futuro si no va al espacio”, dijo luego.
Obituario
Stephen Hawking, quien murió a la edad de 76 años, luchó contra la enfermedad de la neurona motora para convertirse en uno de los científicos más respetados y mejor conocidos de su edad.
Hombre de gran humor, se convirtió en un popular embajador de la ciencia y siempre tuvo cuidado de asegurarse de que el público en general tuviera acceso a su trabajo.
Su libro “Una breve historia del tiempo” se convirtió en un best-seller improbable, aunque no está claro cuántas personas realmente lograron llegar al final. Apareció en una serie de populares programas de televisión y prestó su voz sintetizada a varias grabaciones. Stephen William Hawking nació en Oxford el 8 de enero de 1942. Su padre, un biólogo investigador, se había mudado con su madre desde Londres para escapar del bombardeo alemán. Hawking creció en Londres y St Albans y, después de obtener un título de primera clase en física de Oxford, se fue a Cambridge para la investigación de posgrado en cosmología. Fuente: BBC News, The New York Times